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Regístrate y accede a la revistaPaola Sevilla, académica de la Facultad de Educación UC, explica que es urgente contar con antecedentes y datos sobre las trayectorias que siguen los alumnos de EMTP. Según la académica, la última encuesta disponible es del año 2009, y se trata de un estudio que recopiló datos retrospectivos de una muestra representativa de 4.200 egresados pertenecientes a la cohorte de 2003.
“No disponemos de datos administrativos que informen sobre la proporción de egresados TP que se quedan trabajando en la empresa en la que realizaron su práctica profesional”, explica la académica UC, quien agrega que, para poder obtener esta información, “es necesario la realización de encuestas de seguimiento a egresados, que exploren sus trayectorias laborales y educativas”.
La última encuesta de este tipo se llevó a cabo en 2009 y recopiló datos retrospectivos de una muestra representativa de 4.200 egresados pertenecientes a la cohorte de 2003. “Según los datos obtenidos en este estudio, un 32% de los egresados TP que completaron su práctica profesional consiguieron empleo en las mismas empresas donde realizaron dicha práctica”, señala Paola Sevilla.
“Lo preocupante es que también entre los años 2017 a 2022 han caído las tasas de realización de práctica profesional de los alumnos de EMTP, por lo que menos estudiantes TP tienen la posibilidad de insertarse en el mundo laboral a través de estas instancias formativas”. Paola Sevilla, académica de la Facultad de Educación UC.
Quince años después, es muy posible que el panorama actual difiera, ya que cada vez es más común que los estudiantes continúen con sus estudios superiores de manera inmediata tras finalizar la educación media. “No obstante, es importante tener en cuenta que después del estallido social y la pandemia de Covid-19, la cantidad de egresados TP que acceden a la educación superior ha disminuido significativamente, pasando del 44,2% en 2019 al 37,6% en 2022.
Lo preocupante es que también entre estos años han caído las tasas de realización de práctica profesional, por lo que menos estudiantes TP tienen la posibilidad de insertarse en el mundo laboral a través de estas instancias formativas. La cifra más crítica se registra para los egresados de la cohorte 2020, donde el porcentaje de no realización de práctica profesional fue de 45%”.
- ¿Cuánto ha impactado la gratuidad en el hecho de que, desde el 2010, las matrículas de estudiantes de primer año en CFT e IP han superado sostenidamente a las universitarias, logrando en el 2022 la mayor cantidad de matriculados en los últimos diez años?
-Los CFT e IP se incorporaron a la gratuidad el año 2017. El incremento sostenido de matrícula en estas instituciones ocurre con anterioridad y se debe a la mayor disposición de financiamiento público, a través de becas y créditos. La primera vez que la matrícula de primer año de CFT más IP superó a la universitaria fue el 2010.
-El 2021 se implementó el Acuerdo Nacional de Articulación, ¿cómo afectó ese acuerdo las trayectorias educativas de los alumnos de EMTP?
-No disponemos de información que indique cuántos egresados de la EMTP han accedido hasta el momento a instituciones de ESTP mediante este acuerdo y, por lo tanto, han convalidado materias, reduciendo así su carga académica. No obstante, todo parece indicar que este número es sumamente bajo, sobre todo debido a que los primeros años de aplicación de este acuerdo coincidieron con los de la pandemia.
A esto se añade el hecho de que esta política ministerial no ha venido acompañada de una estrategia de difusión específica dirigida a los estudiantes y sus familias, que permita informar de manera efectiva acerca de los beneficios que conlleva la convalidación de asignaturas en el marco de este acuerdo.
-Según las cifras que se disponen, ¿este avance en la matrícula en la ESTP no se ha traducido necesariamente en un aumento en la articulación entre diferentes subsistemas?
-Efectivamente, eso se debe a que políticas como el Acuerdo Nacional de Articulación han tenido una implementación accidentada, no solo por factores externos como la pandemia, sino también por la falta de acciones complementarias que faciliten el acceso de información a los estudiantes de la EMTP sobre los beneficios de la articulación. Sin embargo, es importante destacar que no solo se necesita una articulación entre la EMTP y la ESTP, sino también entre esta última y las carreras universitarias. Independientemente de la ruta formativa que los estudiantes escojan, es crucial que tengan la oportunidad de continuar avanzando en su formación profesional, si así lo desean.
-De acuerdo con los datos, existe un claro interés por parte del estudiantado EMTP por rendir la prueba para la admisión universitaria: el 65% del total de la cohorte de 2021 se inscribió en la Prueba de Transición (PDT) y el 51% rindió al menos una de las pruebas. Sin embargo, solo 10% de la cohorte se matriculó en alguna universidad. ¿Crees que puede responder a factores asociados a la pertinencia de la prueba para estudiantes EMTP?
-Desde 1965, año de la Reforma Educativa Estructural, la EMTP, al igual que la educación científico humanista (EMCH), es un camino válido para la continuidad de estudios superiores, incluida la educación universitaria. En ese sentido, las cifras de rendimiento de la PDT son solo un reflejo de la promesa para los estudiantes que eligen esta modalidad de estudios. Lo preocupante es que los egresados de la EMTP están en desventaja respecto a sus pares de la EMCH para rendir esta prueba, porque simplemente no tienen acceso al mismo currículum ni a la profundidad de contenidos en las asignaturas fundamentales.
En mi opinión, en este tema es necesario reconocer que los estudiantes de la EMTP tempranamente definen un campo profesional, y que la continuidad en ese campo es el que se debiera promover, no solo en CFT e IP, sino también en universidades. ¿Por qué no facilitar la transición desde las especialidades de Electricidad o Electrónica a una carrera de ingeniería?
Para ello, la EMTP debe avanzar en la integración de los contenidos de sus módulos de especialidad con las asignaturas fundamentales, elevando su nivel académico. Además, es esencial que la elección de especialidad en la EMTP responda a los intereses vocacionales de los estudiantes y proyecciones a futuro, y no sea una elección condicionada o limitada por el contexto.
-¿De qué manera se te ocurre seguir formalizando la vinculación entre instituciones educativas y sectores productivos utilizando el Marco de Cualificaciones Técnico Profesional –MCTP– como instrumento que permite vincular ambos mundos, con la idea de mejorar las oportunidades para los jóvenes de EMTP?
-La clave para la vinculación de las instituciones educativas y los sectores productivos mediante el MCTP es la Certificación de Competencias Laborales, la cual es responsabilidad de Chile Valora. Si las especialidades de la EMTP o las carreras de la ESTP incluyen certificaciones como salidas intermedias o finales, se facilita la inserción laboral de los estudiantes.
Además, los trabajadores certificados podrían convalidar las asignaturas que se refieren a las mismas competencias de sus certificados al acceder a carreras de la ESTP. Aunque Chile Valora está avanzando en esta dirección, aún queda trabajo por hacer.
Revisa el Acuerdo de Articulación Mineduc-ESTP 2021 aquí.
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