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Regístrate y accede a la revistaFue el primer colegio técnico profesional en crearse en la comuna de Lo Barnechea, del que han egresado más de 1.600 alumnos. San Esteban Mártir es un establecimiento católico con un 92% de vulnerabilidad cuyo proceso formativo siempre ha puesto mucho énfasis en la formación integral de los alumnos, buscando alianzas con la comunidad católica aledaña para lograr de la mejor manera esa formación.
Hace 35 años se creó en Lo Barnechea, San Esteban Mártir, un colegio técnico profesional, con el propósito de dar una alternativa educacional a los niños y jóvenes más vulnerables de la comuna. Un establecimiento con diferentes especialidades enfocadas en servicios, “en que los egresados pudieran encontrar trabajo y al mismo tiempo lograr un vínculo entre las distintas realidades que se viven en una misma comuna”, explica Manuel Solano, gerente de la Fundación Educacional Alto Las Condes, sostenedora del colegio.
Pero además de partir como un colegio técnico profesional con cinco carreras, comenzó como un colegio cristiano, lo que se ha mantenido firmemente hasta el día de hoy. “El directorio está compuesto por 15 integrantes, quienes tienen muy presente que en los estatutos hay una marcada línea cristiana en el colegio, y quienes velan por mantener esa línea”, asegura Solano.
El colegio se ha convertido en un ícono de la comuna, con excelentes resultados. Uno de los grandes aliados ha sido el apoyo de las parroquias vecinas. El proyecto San Esteban pertenece a la comunidad de la iglesia Santa Teresa, por lo que es ahí donde se dan las mayores alianzas. Como cuenta Manuel Solano, en 2021 hicieron un plan de mejoramiento del hogar en que cerca de cincuenta familias de esta iglesia se inscribieron para ir a trabajar personalmente a las casas de familias del colegio. “Se dio una interacción súper buena. Fue una buena instancia para entregar valores, plantear nuevos desafíos y metas a estas familias que visitaban, motivarlas en el esfuerzo y la superación”, explica. “Ahora se está preparando algo similar, pero con clases de reforzamiento y preuniversitarios”, agrega.
Paula Riesco, coordinadora académica del primer ciclo del colegio, afirma que tienen una unión muy importante. “El párroco es parte del directorio de la Fundación y permanentemente hace colectas solidarias para nuestro colegio”, agrega.
Riesco asegura que cuentan con un grupo de voluntarios que los apoyan en algunas labores. “Nos ayudan en las catequesis de primeras comuniones y de las confirmaciones”.
Explica, por otro lado, que en el colegio se enfocan diariamente tanto en la formación académica como en la valórica de los alumnos: “En reconocer a Cristo en ellos. Se dan los sacramentos y se les enseña mucho la Piedad y el amor a Dios. Tienen clases de religión todas las semanas y se reza todos los días”, cuenta. Y agrega: “Para el 2022 tenemos un programa bastante importante de una transversalización de las clases de Religión de todo el colegio, de prekínder a cuarto medio”.
La transmisión de valores es algo que se da en el día a día. “Se ven los principios y los valores cristianos a través de la convivencia de los niños y de los papás”. Y destaca que a las familias también se les transmite esto. “Se les hacen reuniones mensuales y escuelas para padres, donde se les va orientando en este camino de los niños de aprendizaje de valores y principios cristianos”, señala.
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