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Ocho nuevos indicadores serán usados junto al Simce para clasificar las escuelas. Entrevistamos a Ignacio Irarrázaval presidente del Consejo Nacional de Educación (CNED), entidad encargada de su asentimiento.
Por Marcela Paz Muñoz Illanes
Recientemente se aprobaron nuevos indicadores adicionales a los que ya existían para medir la calidad de los establecimientos educacionales. Serán usados en forma adicional a los estándares de aprendizajes asociados al Simce.
Lo importante, señala Ignacio Irarrázaval es que estos “otros Indicadores de Calidad Educativa (OICE) responden a un anhelo muy grande del sistema educativo que es tener un índice de calidad de la educación no centrado exclusivamente en el SIMCE. Esto quedó consignado en la LEGE (Ley General de Educación) y es un cambio muy esperado por la comunidad académica y escolar que es tener otras dimensiones para medir calidad educativa más allá de solamente resultados de la prueba estandarizada”.
¿Qué efectos tendrá esta nueva medida?
Por primera vez se clasificarán los establecimientos educacionales en cuatro categorías: alto, medio, medio-bajo e insuficiente. Esas categorías de escuelas; que técnicamente se ha llamado “ordenamiento” se producen por una combinación de –estándares de aprendizajes asociados a SIMCE y otros Indicadores de Calidad Educativa (OICE) que son los ocho indicadores mencionados. La combinación de estas dos dimensiones produce finalmente el ordenamiento en cuatro clases.
¿Cuáles son esos nuevos criterios?
Los cuatro primeros medirán factores no cognitivos: autoestima académica y motivación escolar; convivencia; formación y participación ciudadana; y hábitos de vida saludable.
Por ejemplo, la evaluación de la autoestima académica incluye tanto las percepciones de los estudiantes frente a sus aptitudes, habilidades y posibilidades de superarse, como la valoración que hacen sobre sus atributos y habilidades en el ámbito académico. La motivación escolar evaluará las percepciones de los estudiantes respecto de su interés y disposición al aprendizaje, sus expectativas académicas y motivación al logro, y sus actitudes frente a las dificultades y la frustración en el estudio.
Los otros cuatro criterios medirán la eficiencia del sistema: tasa de asistencia y retención escolar (deserción), equidad de género y la tasa de titulación en el caso de los liceos técnicos.
¿De qué modo se evaluarán cada uno de estos nuevos indicadores?
El objetivo buscado es que cada uno de estos nuevos indicadores pese en proporción lo mismo. En total, los ocho pesarán del orden del 33%. El resto corresponde a los resultados del Simce.
¿Cómo se medirá el factor de convivencia escolar?
Considerando las percepciones y las actitudes que tienen los estudiantes, docentes, y padres y apoderados con respecto a la presencia de un ambiente de respeto, organizado y seguro en el establecimiento.
¿Qué se entiende por un ambiente de respeto en la escuela?
Incluye las actitudes que tienen los estudiantes, docentes, y apoderados en relación al trato respetuoso entre los miembros de la comunidad educativa, la valoración de la diversidad y la ausencia de discriminación que existe en el establecimiento. Además, considera las percepciones respecto al cuidado del establecimiento y el respeto al entorno de parte de los estudiantes.
Un ambiente organizado, en tanto, considera las percepciones que tienen los estudiantes, docentes, y padres y apoderados sobre la existencia de normas claras, conocidas, exigidas y respetadas por todos. Además del predominio de mecanismos constructivos de resolución de conflictos. Se evalúan las actitudes que tienen los estudiantes frente a las normas de convivencia y su transgresión.
¿Cómo se medirá la formación ciudadana?
Se evalúan las actitudes de los estudiantes frente a su establecimiento; las percepciones de estudiantes, y padres y apoderados sobre el grado en que la institución fomenta la participación y el compromiso de los miembros de la comunidad educativa. Y la percepción de los estudiantes sobre el grado en que se promueve la vida democrática.
¿Cómo se miden los hábitos de vida saludable al interior de un establecimiento?
Se consideran las siguientes dimensiones:
¿Cómo se mide la asistencia?
Se considera la distribución de los estudiantes según cuatro categorías elaboradas de acuerdo con el número de días que un estudiante asiste a clases, en relación con el total de jornadas escolares oficiales de un año. Se distinguen:
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