Actualmente en el país existen 60 Liceos Bicentenario y el Gobierno pretende, de aquí a 2022, llegar a un total de 300 establecimientos de excelencia enfocándose en los técnicos profesionales.

En Chile la Enseñanza Media Técnica Profesional (EMTP) es la modalidad de educación responsable de entregar a los jóvenes una formación integral en el ámbito de una especialidad que facilite su inserción laboral, así como también la continuación de sus estudios superiores.

Los datos de Mineduc señalan que 4 de cada 10 jóvenes elige un liceo técnico profesional. Esta cifra aumenta si se considera solo la educación pública, donde el 56% opta por esta modalidad.  Quienes cursan la Enseñanza Media Técnica Profesional provienen de los quintiles inferiores de ingresos y reportan indicadores de logro educacional de entrada más bajos en relación a aquellos que siguen la Enseñanza Media Científico Humanista.

En este contexto, Patricio Traslaviña, director del Programa Técnico Profesional de Fundación Chile, respecto de los anuncios gubernamentales señala que “…primero deberíamos avanzar mucho más fuerte en otra de las medidas anunciadas, como lo son el Marco de Cualificaciones y también contar con una definición de estándares e indicadores de calidad específicos para la Educación Técnica que permitan señalar claramente a todos los liceos, sobre cuál es su actual estado y lo que deben mejorar. En la actualidad hay 950 liceos que imparten EMTP en el sistema y apoyar solo a una selección de 35 en la primera etapa y 300 en el largo plazo, siempre será insuficiente”.

Y es que a juicio del experto, la Educación Media Técnico Profesional, tiene muchas deficiencias, entre ellas es que los liceos de la EMTP trabajan un marco curricular y con planes y programas de estudio asociados desajustados a las pertinencias del mercado laboral actual.

“Hay carencia de información y datos para una gestión eficiente, y algunos de estos problemas se están acrecentando a pasos agigantados debido a la irrupción de las nuevas tecnologías aplicadas a sistemas de trabajo y producción que se imponen. Algunas de las deficiencias más relevantes se refieren a la falta de información confiable en el sistema para la toma de decisiones a nivel de instituciones educativas, sobre el alineamiento de su oferta en términos de pertinencia con el desarrollo productivo territorial y por ende que tanto está asociada a empleos y remuneraciones atractivas”

Traslaviña dice además, que “el Sistema de Aseguramiento de la Calidad de la Educación en Chile no cuenta con estándares ni indicadores para medir la calidad de la EMTP”, de ahí el problema de información del que habla.

En cuanto a la tasa de titulación de la EMTP, un porcentaje importante de sus egresados no se titula, porque no realiza su práctica profesional. Es necesario que los liceos TP se hagan responsables de asegurar este espacio de formación de sus alumnos en las empresas, como una manera de propiciar que la formación que imparten se vincule a los requerimientos del mercado.

De hecho, para ser Liceo Bicentenario de excelencia, los TP deben contar con convenios con empresas, para de alguna manera facilitar la salida del sistema educacional al mundo laboral.

El director del Programa Técnico Profesional de Fundación Chile, explica que es necesario y bueno, todo esfuerzo en pro de la Educación Media Técnico Profesional, “Desarrollar política para la Educación Técnico Profesional, permite estructurar el sistema, definir procesos y generar información confiable sobre las posibilidades y oportunidades que se abren a la personas que optan por este camino. En lo específico la EMTP necesita apoyo por que el índice de vulnerabilidad educativa (IVE) de la población que atiende supera el 80% y es visible que tiene desafíos de alto nivel por el cambio tecnológico y las características del empleo en el siglo XXI”, recalca.