En el corazón de Pedro Aguirre Cerda desde el año 1997, que el director Juan Carlos Navarrete  ha logrado instaurar una república escolar independiente: es la escuela Karol Cardenal de Cracovia. Hace pocos meses, el establecimiento fue seleccionado por el libro “Viaje a la escuela del siglo XXI”, que recopila y destaca la historia de 50 colegios en 20 países.

Por Marcela Paz Muñoz Illanes

Allí sus alumnos votan por alcaldes, ministros y presidentes. Con creativas actividades, como el “amornómetro” y el “no se queje, reclame”, entre otras actividades, se consigue crear un ambiente de sana convivencia escolar que contribuyó a que el establecimiento aumentara considerablemente su matrícula.

Su director confiesa que “no se cree el cuento de ser la escuela más innovadora”, pero la forma como operan y trabajan en su comunidad escolar prueba por qué sí fueron seleccionados. “Los cambios estructurales que señala el organigrama nos exigen como docentes un nuevo rol: la Escuela Karol Cardenal de Cracovia es pionera en la transformación de clientes inactivos —alumnos, padres, apoderados— en  activos socios, considerándoseles los primeros actores del sistema educativo”.

—¿Cuál es el foco que han logrado instaurar en la escuela y que los ha transformado en líderes? 

—Nos hacemos cargo de nuestros propios problemas y no esperamos que desde las cúpulas gubernamentales nos vengan a dar soluciones. Nos tomamos esto de la educación muy en serio y visualizamos tempranamente que no podemos seguir repitiendo pretéritas costumbres por años arraigadas. De hecho, la vorágine de cambios tecnológicos ha revolucionado la vida. Los más pequeños son esponjas para aprender e incorporar a su mundo cada metamorfosis de la vida actual; sin embargo, ellos se aburren en las escuelas porque allí se repite un arcaico sistema escolar que sirvió a una época. 

—¿De qué manera trabajan con los profesores y el equipo directivo? 

—Por largo tiempo, en las instituciones educativas han sido los profesores los únicos llamados a evaluar y, por esta forma de hacer las cosas, se ha hecho responsables  a los maestros como señores garantes de todo el sistema. En la Escuela Karol Cardenal de Cracovia, la responsabilidad ética profesional de sus maestros está orientada hacia dos grandes áreas: a ser asesores de una Comuna Curso y a ser asesores de un Ministerio.

Para desarrollar en forma sus trabajos, ellos deben aplicarse hacia tres grandes objetivos.

• Objetivo Social: Comprender y desarrollar en todas sus formas las proyecciones institucionales. Esa es primera obligación del maestro para la humanización de la vida escolar.
• Objetivo Profesional: Estar comprometidos con la ética y la vocación de los docentes. 
• Objetivo Corporativo: Está relacionado con la lealtad que se debe a la comunidad cracoviana, donde se avala en el cumplimiento de  las normas constitucionales, principios filosóficos y objetivos de la institución, adquiridos por el solo hecho de pertenecer a la Escuela Karol Cardenal de Cracovia. 

—¿Por qué fueron seleccionados como una escuela innovadora entre 20 países?

—Eso de la innovación nos produce  incertidumbres… Poner la mirada en las personas multiplicando optimismo,  abriendo espacios de participación ciudadana y reconociendo a las personas en ambientes de inclusión como sujetos de derechos que deben cumplir deberes. 

—¿De qué manera trabajan con los alumnos? 

—La persona, sea cual sea su condición de origen, merece toda nuestra consideración, amor y respeto. Los alumnos son primeros actores y protagonistas principales en la comunidad de aprendizaje que estamos creando. Dejamos de lado el papel inactivo de clientes pasivos que por siempre han tenido los más pequeños, para incorporarlos como socios activos que construyen, dando forma en la interacción a una nueva cultura de confianza y cooperación mutua.

—¿Cómo cree que les afectará el proyecto de carrera docente recientemente promulgado?

—Estaba confiado en que traería muchas cosas buenas, como la formación inicial, la mentoría e inducción al cargo, evaluación de procesos por parte del CPEIP destinada a  profesores principiantes, creación de políticas de formación para el desarrollo profesional, certificación del desarrollo profesional.  Todo ello se echa por tierra al momento de hablar de sueldos en tramos. ¿Quién va a querer estudiar pedagogía con los sueldos ofrecidos? 

¿Cuáles son los cimientos de la Escuela Democrática del siglo XXI, Karol Cardenal de Cracovia?

• Investigar los sueños de lo que debiera ser una escuela como comunidad de aprendizajes. Formamos la Primera Constitución Política del Gobierno Escolar.
• Reconocer la mirada a los alumnos como protagonistas principales de la institución.
• Construir diferentes instrumentos (amornómetro, compromisoscopio, meritoscopio, perfil del alumno cracoviano, “No se queje, reclame”) que nos permiten tener una mirada más humana.
• Valorar liderazgos naturales para que se busquen soluciones comunitarias a los problemas. 
• Transformar la gestión institucional y crear una estructura funcional que llamamos “Karolganigrama”, una red humana de colaboradores con proyectos de mejoramiento.