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Entrevistamos al destacado psiquiatra español y autor de innumerables libros, Enrique Rojas, quien entregó orientaciones a los profesores para trabajar en la sala de clases la sexualidad y el amor verdadero.
Por Marcela Paz Muñoz Illanes
Sobre valores, sexualidad sana y el rol de los profesores fue la entrevista realizada al destacado psiquitra español, Enrique Rojas, quien estuvo de visita en Chile invitado por Duoc UC. Después de impartir una conferencia en esa institución, este catedrático de psiquiatría de la Universidad Complutense de Madrid y director del Instituto Español de Investigaciones Psiquiátricas se refierió a la importancia de “educar en valores a los alumnos, aquellos que no pasan de moda”.
Además, comentó casos tan duros como la violación de una menor de 11 años y la forma cómo los profesores debiesen tratar ese tema junto a sus alumnos. “Es complejo. El educador debe estar preparado y enfrentar la situación de forma reflexiva junto a sus estudiantes”.
¿Cómo abordar el tema de la sexualidad con los alumnos?
Existen dos tipos de sexualidades contrapuestas, el sexo sin amor y en la otra vereda, la sexualidad con amor comprometido y auténtico. Cuando la sexualidad carece de amor verdadero, se convierte en una relación epidérmica y superficial, centrada en el emotivismo.
La clave, dice, es enseñar el significado del “amor verdadero a los jóvenes: la donación de la persona en su totalidad, con su mente y también con su cuerpo. Pero se trata de una donación total y completa, para toda la vida, dentro del matrimonio”.
A diferencia de una sexualidad orientada al placer que busca transformar a la persona solamente en un objeto, en un bien que se transa y que al mismo tiempo, se desecha.
¿Qué características tiene una relación de amor verdadero?
Es una relación que mezcla, integra e incluye a la vez; lo físico, lo genital, lo sicológico, los sentimientos, y la inteligencia, lo espiritual y la historia de la persona. Allí crece y se desarrolla una conexión de personas, más que solamente de un cuerpo con otro.
El problema, asegura, es que muchas relaciones entre adolescentes son de cuerpo a cuerpo, con carencia de sentimientos y centrado solamente en el emotivismo. Allí se busca primordialmente el contacto sexual.
El psiquiatra comentó además que uno de los fenómenos amorosos propios del siglo XXI son «los amores epidérmicos». «Son relaciones transitorias, sorprendentes y caleidoscópicas, encuentros epidérmicos, que generan un zapping amoroso, con relaciones de usar y desechar, que a corto plazo son divertidas pero que, a la larga, dejan un vacío muy grande y un escepticismo.»
¿Cómo integrar la sexualidad verdadera al mundo de los jóvenes?
La mejor manera de enseñar la sexualidad en los jóvenes es integrarla al plano de la persona, con su totalidad. Todas las relaciones sexuales mal concebidas, no se fundan en el verdadero amor.
En la sala de clases, dice, el profesor debe poder explicar a sus alumnos el siguiente mensaje: cuando cada uno entrega su cuerpo, lo que está donando es su persona. Nada más y nada menos. “El docente debiese procurar hacer atractiva la exigencia para que se convierta en una sexualidad sana. Aquello tiene que ver con los valores”.
Pero, ¿qué son los valores?
Aquellos bienes que no pasan de moda con los años. Hay cuatro valores que son claves: la alegría, la amistad, la solidaridad y la coherencia de vida. La alegría de aceptar nuestras limitaciones y seguir intentando superarlas con optimismo, sacando lo mejor de uno mismo. La amistad y la empatía, y la solidaridad, que es la cercanía con el otro.
¿Cómo resolver los problemas de bullying al interior del aula?
Se ha judicializado la labor de los profesores. En colegios ingleses, por ejemplo, los padres firman un consentimiento informado en que aceptan que se reprenda a sus hijos, para que tomen conciencia de la situación de agresión por la cual están atravesando.
Por ello, vale la pena, dice, reflexionar acerca del significado de educar. “Educar es convertir a la persona, entusiamar al alumno por los valores que no pasan nunca de moda. Sacar lo mejor que cada uno tiene dentro de sí.”
¿Qué valores debiese profundizar un profesor?
La educación de la inteligencia, de los sentimientos, de la voluntad, de la personalidad. Enseñar a los alumnos a expresar sus sentimientos. La inteligencia le permite al estudiante captar la realidad, pero también incluye el orden, el que el alumno aprenda a conocer sus objetivos, y tenga la voluntad para seguirlos, con la motivación adecuada.
¿Cómo ve la familia actualmente?
Lo padres son los primeros educadores de sus hijos, y en la cultura chilena, es la madre quien transmite los valores de la familia, en general. El padre es más bien quien transfiere el tema del: estudio, del dinero y de la economía. Un buen padre vale más que cien maestros y una madre que funciona es el soporte de una familia.
El maestro y el buen educador es quien enseña lecciones que no aparecen en los libros de estudio”. El problema, dice el psiquiatra, es que en la actualidad hay muchos profesores, pero pocos maestros y todavía, menos padres preparados.
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