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Regístrate y accede a la revista“La pandemia por COVID-19 volcó al mundo hacia el aprendizaje digitalizado que, al parecer, llegó para quedarse”.
Antes de que el virus SARS-CoV-2 apareciera por primera vez en China, el mundo seguía llevando una vida normal. En ese momento, el sector educativo estaba más centrado en las clases presenciales que en el aprendizaje digital (eLearning). Sin embargo, este virus altamente contagioso, forzó a los gobiernos a cerrar las instituciones educativas lo cual resultó en más de mil millones de estudiantes afectados en más de 130 países. Así es como el mundo se volcó hacia el aprendizaje digitalizado, que, al parecer, llegó para quedarse.
En este artículo, exploramos cómo la pandemia por COVID-19 cambió para siempre el eLearning y cómo puedes aprovecharlo.
Desde el año 2000, los ingresos de la industria del aprendizaje en línea han crecido en más de un 900 %. Aunque el interés en la educación en línea ha experimentado un rápido aumento en los últimos años, incluso antes de la llegada del virus; la pandemia ha ayudado a darle un impulso aún más fuerte.
Mientras tanto, el aprendizaje virtual experimentó un aumento del 16 % durante la pandemia, mientras que la formación dirigida por un instructor experimentó un importante descenso. En consecuencia, más del 64 % de los estudiantes estadounidenses de secundaria se encuentran utilizando herramientas de aprendizaje en línea diariamente.
“El aumento en la demanda de educación en línea también causa una demanda aún mayor de cursos de gran calidad y procesos bien establecidos para la instrucción del contenido y la creación de aulas virtuales”.
Por otro lado, el 52 % de los estudiantes estadounidenses graduados afirmaron que consideran que la educación universitaria en línea es superior al aprendizaje presencial en clase, en comparación con el 39 % de los estudiantes universitarios que consideran que las clases en línea son mejores que las presenciales.
Según un reporte de Statista, el 49 % de la población estudiantil en todo el mundo afirmó haberse inscrito en un curso en línea durante los últimos 12 meses. Además, el 95 % de los estudiantes indicó estar satisfechos con la educación en línea y que el aprendizaje basado en la web es más divertido y les ayuda a retener la información más rápido. En un informe de Forbes, se reporta que el aprendizaje en línea aumenta las tasas de retención de estudiantes entre un 25 % y un 60 %.
Sin embargo, la adopción del aprendizaje digital no depende de individuos, profesores ni de administradores independientes. De las 25 mejores universidades estadounidenses, 22 de ellas ofrecen actualmente cursos en línea de forma gratuita y se espera que Asia-Pacifico sea el mercado MOOC de más rápido crecimiento entre el 2020 y el 2025. Pero eso no es todo, según Arizona State University, los cursos en línea ayudan a las instituciones educativas a ahorrar $54 por hora crédito, un 50 % del costo promedio de la hora crédito.
Es evidente que el eLearning es una industria del presente y futuro. No obstante, el aumento en la demanda de la educación en línea causa una demanda aún mayor de cursos de gran calidad y procesos bien establecidos para la instrucción del contenido y la creación de aulas virtuales. Pero, sin las herramientas adecuadas, todo parece imposible.
Revisemos las tecnologías de aprendizaje digital y las herramientas de diseño instruccional que los profesores y administradores deben tener en cuenta este año y en el futuro.
Un aula virtual es una herramienta de formación que ayuda a los profesores a crear un entorno en el cual los participantes pueden comunicarse, ver y discutir presentaciones y vídeos instruccionales, así como acceder a otros recursos de aprendizaje. Todo en un espacio en línea. Es muy parecido a un aula tradicional, donde hay al menos un instructor y la clase es llevada a cabo en tiempo real. La diferencia es que los usuarios se conectan a través del internet y pueden participar desde cualquier lugar del mundo.
Mientras tanto, las herramientas de conferencias web son muy similares. Por supuesto, carecen de algunas funciones de interactividad, pero permiten que los educadores y los estudiantes permanezcan conectados y colaboren en un entorno en línea en tiempo real, permitiendo además que cientos de estudiantes se conecten a la vez, lo cual es imposible con el software de aula virtual. Pero esta opción puede ser más conveniente para la formación empresarial.
¿Cómo pueden los profesores compartir materiales del curso con sus estudiantes? Los correos electrónicos o chats probablemente no sean la mejor opción para hacerlo. Un sistema de gestión de aprendizaje (LMS por sus siglas en inglés) es lo más conveniente. Un Learning Management System o LMS es una plataforma en línea para almacenar y distribuir materiales de aprendizaje a través de internet. En un LMS, los estudiantes tienen cuentas personales en las cuales pueden ver los cursos asignados y el calendario de actividades de aprendizaje. Pueden tomar cursos y evaluaciones en línea, asistir a sesiones de aprendizaje virtual (muchas plataformas ofrecen oportunidades para el aprendizaje combinado) y poder hacer seguimiento de los resultados de aprendizaje.
Un LMS adecuado puede ahorrarles a los profesores y administradores horas que pasan tratando de organizar el proceso de enseñanza a diario. Automatiza el trabajo más tedioso, como evaluar el aprendizaje de los estudiantes, calificar, procesar estadísticas y preparar informes.
Los documentos en Word y los archivos PDF son modalidades desactualizadas que no te permiten saber si un estudiante los ha estudiado o no. Con herramientas de autor modernas, los profesores pueden crear cursos en línea que involucran a los estudiantes y (junto a un LMS) les permite ver su evolución.
La mayoría de las herramientas de autor mantienen una estructura de curso basada en diapositivas. Un desarrollador de cursos crea tantas diapositivas como sean necesarias y las llena con texto, imágenes y animaciones. Dependiendo de la herramienta, los usuarios pueden crear otros tipos de materiales de aprendizaje, por ejemplo, cuestionarios en línea, videotutoriales, actividades de arrastrar y soltar y simulaciones de diálogo. La idea clave detrás del uso de estas herramientas de autor es facilitar que los usuarios como los profesores puedan crear contenido de eLearning profesional.
Dado que el COVID-19 forzó a profesores, estudiantes y administradores a cambiar al aprendizaje digital como una alternativa a las clases presenciales, distintas herramientas de aprendizaje en línea se han convertido en la solución ideal. De estas diferentes herramientas, los profesores pueden escoger cuál utilizar basado en sus preferencias personales. Pero es importante tener en cuenta que elegir el software adecuado es fundamental para la creación de una experiencia de eLearning de alta calidad.
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