¿Tenemos que insistir a nuestros adolescentes que usen casco para andar en bicicleta o skate? Sí, pues previenen o aminoran los daños en caídas deportivas. Es una oportunidad para conversar acerca de cuidar el propio cuerpo y salud. 

Sabemos que es propio del funcionamiento del cerebro adolescente poner más énfasis en las metas que en los riesgos. Eso les permite avanzar en sus objetivos e ir forjando su camino independiente del nuestro. Como padres y profesores debemos comprender y no juzgar este rasgo, pues no es en sí negativo. 

Y, al mismo tiempo, debemos preguntarnos: Dado que nuestro adolescente puede no contemplar los riesgos, ¿cuál sigue siendo nuestro rol como padres y educadores? Debemos “prestarles nuestro cerebro maduro”, podría decirse, para ayudarles a ver lo que ellos, por su edad, no tienen en cuenta de manera espontánea. 

Un ejemplo concreto es el uso de cascos al andar en bicicleta, skate, moto, esquiar, etc. Las estadísticas varían entre estudio y estudio, pero los porcentajes de prevención del uso del casco para evitar la muerte oscila entre el 36%, 37% y el 62%. Respecto de ello, los expertos en seguridad concluyen que vale la pena absolutamente usarlo y que es necesario que los adultos velemos por ese hábito en niños y adolescentes.

El uso del caso correcto y de la forma correcta puede prevenir daños neurológicos e, incluso, la muerte. 

Para tener en mente al sentarse a conversar:

• Un casco para moto sirve para bicicleta, pero no al revés. Mientras más velocidad, más riesgo tiene una caída.
• Si el joven hace un deporte que requiere casco de forma frecuente, es deseable que el casco sea certificado por alguna entidad de seguridad.
• Se sabe que algunas personas usan el casco solo cuando van en carretera, a velocidad alta. Sin embargo, las estadísticas muestran que la mayoría de los accidentes ocurren en la ciudad. Ahí hay más objetos con que chocar y se está sometido a los posibles errores de muchos otros conductores y peatones. 
• Para promover el uso del casco se puede alentar a los adolescentes a elegir su propio casco y decorarlo para reflejar su individualidad. También se pueden agregar calcomanías y luces reflectantes para aumentar la visibilidad del niño cuando anda en bicicleta en la carretera.
• El casco debe ser reemplazado si se involucra en un choque, se daña o se le queda pequeño. Es mejor evitar el uso de cascos de segunda mano, si es posible.
• En España, según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), aproximadamente un 20% de los fallecidos en accidente de tráfico entre 10 y 14 años eran usuarios de bicicleta. Las lesiones en la cabeza fueron la causa principal de fallecimiento. 
• Los adultos, por supuesto, debemos ser los primeros es dar el ejemplo. Y esforzarnos en dar confianza a los adolescentes para que puedan contarnos si tuvieron un accidente, pues eso nos permitirá estar alertas a daños. 

Fuentes:

American Academy of Pediatrics: Helmets Significantly Reduce Risks of Traumatic Brain Injury While Bike-Riding or Participating in Other Sports

https://www.aap.org/en/news-room/news-releases/aap/2022/american-academy-of-pediatrics-helmets-significantly-reduce-risks-of-traumatic-brain-injury-while-bike-riding-or-participating-in-other-sports/ 

Elección y uso del casco. Centro de Educación Vial de Salamanca.

https://www.dgt.es/export/sites/web-DGT/.galleries/downloads/conoce_la_dgt/que-hacemos/educacion-vial/jovenes/ESO_educacion_vial/ALUMNOS-U4-EL-CICLOMOTORISTA-USO-CASCO.pdf