Suscríbete a nuestra revista y podrás leer el contenido exclusivo online
Regístrate y accede a la revistaLas Raíces de la Aceptación: el rechazo o el olvido
¿Qué tan importante es la amistad para los niños?
¿Qué hace que un niño sea querido, rechazado u olvidado en su curso?
¿Qué podemos hacer nosotros como profesores para fomentar relaciones de amistad genuinas dentro de nuestros cursos?
Por Grupo Educar
La importancia del tener amigos para el desarrollo armonioso de los niños
Según Zick Rubin en su libro “La amistad de los niños” el tener amigos es importante por tres razones:
Por otro lado, los niños que sufren problemas de rechazo dentro de su curso, o que están aislados, suelen ser niños que son más proclives a desarrollar problemas de otro tipo, tales como angustia y depresión.
Del amigo casual al amigo cercano hasta la amistad profunda
Así como maduramos en otros aspectos, la amistad también madura.
En preescolar lo normal es el amigo que es mi amigo porque jugamos juntos en el recreo, y como la raíz de la amistad es así de práctica el cambio de circunstancias externas puede hacer cambiar de amigos. Como por ejemplo; me cambiaron de puesto y ahora soy amigo de Javier.
En la edad escolar los amigos se empiezan a estructurar en torno a intereses en común, el fútbol, el elástico, conversar, hacer travesuras.
Al llegar a la adolescencia el interés estará más centrado en características de personalidad que hacen que unos se sientan más a gusto con otros.
Las raíces de la amistad: popularidad, aceptación, rechazo y olvido
La popularidad de un niño dentro de sus compañeros no tiene que ver sólo con su capacidad para las relaciones sociales, sino que muchas veces se relaciona con otras características que lo hacen ser valioso ante los otros. Por ejemplo: si un niño hombre es bueno para el fútbol y otras habilidades atléticas, ser buena alumna y bonita entre las niñas; para ambos sexos el ser activo y hábil en los juegos, son todos factores que aumentan la popularidad.
La aceptación de un niño por sus pares, el ser querido y aceptado dentro de un curso, no depende ya de factores de popularidad, sino de las habilidades sociales de ese niño. Dicho en fácil: si es simpático y buen amigo, agradable en su trato hacia los otros.
La falta de popularidad de un niño, que se refiere a que un niño no sea buscado por sus pares y/o sea rechazado por ellos puede asumir dos formas:
a) la del niño abiertamente rechazado: que los otros no quieren sentarse con él, no quieren hacer trabajos con él o que cuando pide entrar a un grupo de juego durante los recreos, se le niega la entrada.
b) Otra forma de ser impopular es la del niño olvidado: es decir un niño que no es rechazado, pero que nadie lo busca para jugar, para trabajar con él y los demás no inician interacciones con él, es como si nadie notara su presencia.
Los estudios muestran que los niños rechazados tienden a mostrar conductas más agresivas hacia sus compañeros, especialmente para resolver conflictos, pero también caras más serias y gestos más agresivos al aproximarse a otros, o respuestas más pesadas cuando otro le hace un pedido.
Se ha observado también que son niños que tienden a molestar más frecuentemente a los otros cuando están trabajando y que usan estrategias inadecuadas para iniciar una interacción con los otros. Por ejemplo: si dos niños están jugando a las bolitas él se acercará y dirá: “uy que malo ese tiro” o “yo tengo muchas más bolitas en mi casa”. Si un grupo está jugando al elástico se acercará y dirá: “ahora quiero saltar yo” o “yo nunca pierdo cuando salto”.
Otro aspecto frecuente a los niños rechazados es el de mostrar conductas que son consideradas por los otros como inapropiadas para la edad. Por ejemplo: el llanto excesivo en la básica, el acusar alrededor de 4° básico. También el ser muy sucio o andar muy desarreglado es un factor de rechazo muy mencionado por los niños.
En relación a los niños olvidados, los estudios muestran que son niños que tienden a aislarse, que no inician interacciones hacia los demás, no sonríen, no saludan, no inician conversaciones, no convidan a jugar, no ofrecen ayuda. Así mismo, responden frente a los intentos de interacción de otros de un modo muy pasivo, es decir si otro les “mete conversa” responden con monosílabos, si los convidan a jugar se quedan mirando etc.
Estrategias para promover la integración de los niños dentro del curso
Examinaremos diferentes estrategias para fomentar el desarrollo de la amistad dentro del curso y de integración de niños rechazados y olvidados.
Revisa nuestro contenido en todas las plataformas desde un teléfono hasta nuestra revista en papel.
Mantengamos la conversación, búscanos en twitter como @grupoEducar
Tweets by grupoEducarIngresa a nuestra comunidad en Facebook y profundicemos el debate.