-¿Cómo fue tu etapa escolar?

-Yo era muy “ñoña”, me iba a la biblioteca en los recreos. Con mi hermano sufrimos muchísimo bullying, por ser de un color diferente, por tener nombres distintos, además en esa época yo era vegetariana, ahora orgullosa vegetariana. También, iba en un colegio privado de Providencia, donde la mayoría de los niños eran blancos. Ellos me decían: “Si pintamos la sala de negro, Komal se pierde”. El bullying era muy intenso. Mi mamá reclamó muchas veces. Quise mucho que me cambiaran, pero no podían porque las cuotas de incorporación eran muy caras; por lo menos me trasladaron de sede. 

Entonces pensé: ¿cómo puedo hacer para que no me afecte el bullying? Ser muy buena y que me pidan el cuaderno; así pude escapar. Mi empoderamiento siempre fue más espiritual gracias a la influencia de mi mamá, que también lo era. 

-¿Recuerdas a algún profesor?

-Hay varias profesoras que recuerdo de mi época escolar, por ejemplo, a la Miss Beatriz, ella era de biología, ¡cómo olvidarla! Su exigencia fue crucial para mí. También recuerdo a la Miss Vera, la directora del colegio, quien, junto a la Miss Vero, mi profesora jefe, me cuidaban y protegían. 

-¿Alguna anécdota de ese tiempo?

-Dentro de mi etapa escolar, entré a la Sociedad de Debate del colegio: esto me sirvió para poder defenderme del bullying, fue de gran ayuda. Tercero y cuarto medio tuve más liderazgo en temas del centro de alumnos, debate, iba a competencias; hice la transición a la ciencia. Esa resiliencia, junto con mis años en la Universidad de Chile, fue lo que me forjó.

-¿Cuándo y cómo nace tu interés por la ciencia? 

-Mi pasión por las ciencias nace de la ambición por buscar soluciones para los grandes problemas de la humanidad, así como lo hacen quienes han logrado obtener premios Nobel. También el querer responder preguntas, ver el mundo que te rodea.

Mi pasión por las ciencias nace de la ambición por buscar soluciones para los grandes problemas de la humanidad, así como lo hacen quienes han logrado obtener premios Nobel. También el querer responder preguntas, ver el mundo que te rodea.

Recuerdo que cuando estaba en el colegio, realicé un trabajo sobre ganadores del Premio Nobel y entre ellos estaba Pablo Valenzuela, chileno que recibió el Premio Nacional de Ciencias Aplicadas por el desarrollo de la vacuna contra la hepatitis B. Él es bioquímico y es una carrera bien reconocida dentro de la Universidad de Chile.

Por ahí nace esta pasión y búsqueda por querer solucionar algún problema de la humanidad y así llegué a mi gran objetivo, que es democratizar las ciencias a través del uso de la tecnología.

-¿Cómo fue tu experiencia universitaria?

-Muchas de mis clases en la Universidad de Chile eran teóricas y cuando había que experimentar, teníamos que compartir y esperar por los equipos. Además, mientras era estudiante universitaria visité colegios de los alrededores y ahí pude ver que pocos establecimientos tenían acceso a un laboratorio o básicamente no contaban con uno, y vi a los niños muy curiosos y entusiasmados, pero no tenían cómo fomentar esa curiosidad, lo que me pareció muy lamentable. 

-¿Y cuándo y cómo nace Lab4U?

-La motivación inicial detrás de la creación de Lab4U surgió durante mi tiempo como estudiante universitaria, cuando viví la falta de equipamiento para practicar lo que aprendíamos en clases. Lo más impactante fue tomar conciencia de que esto comienza en los colegios: vi a muchos estudiantes llenos de curiosidad y entusiasmo, pero sin los recursos necesarios para fomentar esa inquietud científica. 

En 2013 supe de “Start-Up Weekend”, evento auspiciado por Corfo y Start-Up Chile. El aviso decía “Change The World in 54 hours”, ¡y yo pensé que me iban a enseñar a cambiar el mundo en 54 horas! Entré a un mundo que no conocía, yo no sabía nada de emprendimientos ni tecnología. Ahí conocí a Álvaro José Peralta, ingeniero informático que se convirtió en socio en Lab4U. Nos pidieron presentar un problema y pensé en la falta de equipamiento de los laboratorios, incluso en la misma universidad. ¿Cómo puedes aprender a andar en bici leyendo un libro? La ciencia es experimentar. Empezamos a investigar y vimos qué laboratorios de bajo costo existían en otras partes del mundo, pero seguían siendo caros para Latinoamérica. Ante la precariedad de nuestras escuelas, ¿cómo íbamos a fomentar la ciencia y tecnología? 

-En este contexto, ¿qué necesidad viste en la región?

-Al revisar datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), se hizo evidente la magnitud del problema: el 88% de los establecimientos educativos en Latinoamérica carece de la infraestructura de laboratorios debido a los costos. Esto refuerza la importancia de Lab4U en su misión de proporcionar soluciones accesibles y efectivas para democratizar la educación científica, no solo en Chile, sino en toda Latinoamérica y el mundo. El impacto que hemos logrado se refleja en la posibilidad de entregar a los estudiantes la oportunidad de explorar y aprender a través de la experimentación, lo que va cerrando la brecha de acceso a la educación científica y promoviendo el interés por las disciplinas STEM.

-¿Cómo motivarías hoy a los docentes de ciencias?

-Creo que es muy importante que los profesores internalicen que, para avanzar hacia una verdadera equidad de género en STEM y emprendimiento, es crucial seguir fomentando la diversidad y brindar oportunidades equitativas para mujeres desde las etapas tempranas de su educación. Así como también cambiar las percepciones y estereotipos arraigados en torno a los roles de género en estos campos. La colaboración continua entre líderes, organizaciones y la sociedad en general será clave para superar estos desafíos y construir un futuro más inclusivo y equitativo en el área STEM y emprendimiento.

-¿Qué les dirías a los estudiantes?

-Es esencial que los jóvenes sepan que el talento es universal y que, aunque las oportunidades no siempre lo son, es fundamental entre todos cambiar esta realidad. Mi recomendación es que busquen programas, organizaciones o iniciativas que brinden apoyo y recursos en ciencia y tecnología. Además, que exploren su curiosidad y desarrollen habilidades STEM a través de la experimentación y la participación en proyectos prácticos.

Cambiar la percepción sobre las oportunidades disponibles y brindar acceso a recursos educativos específicos ayudará a construir un mejor camino, más equitativo para las mujeres interesadas en ciencia y tecnología.

-¿Cuál es la relevancia de conocer más la ciencia?

-Creo que la ciencia es ideal para poder comprender el mundo que nos rodea. Entender que la ciencia es preciosa y está detrás de todo, absolutamente todo. También saber que esta es transversal, por lo que es lamentable que pocos quieran estudiarla porque la consideran difícil. La ciencia no es difícil, la ciencia es fascinante y, una vez que la entiendes, te enamoras de ella.