Dr. Alfonso Correa

La conexión entre la mente y el cuerpo es absoluta. Explica el psiquiatra infantojuvenil de la Universidad de Chile, Dr. Alfonso Correa, que “no solo no existe uno sin el otro, sino que puede decirse que la mente está en el cuerpo, no solo en el cerebro”. Es más, agrega, “son interdependientes, íntimamente ligados. Conocida es la interrelación entre corazón y cerebro y cerebro e intestino. En ambos casos, la relación es bidireccional. Es por esto que realizar actividades extracurriculares, o tener un hobby, tiene beneficios tanto para la salud física como socioemocional”.

El también docente de la Facultad de Medicina UDD y jefe de la Unidad de Psiquiatría Infantil de la Clínica Alemana de Santiago, profundiza que “al realizar actividades placenteras y diversas, se utilizan y refuerzan distintas conexiones y circuitos neuronales, lo que aumenta la flexibilidad en la forma de afrontar diversos problemas o circunstancias de la vida. Además, aumenta el repertorio cognitivo y emocional”. 

-¿Cuáles son los beneficios de realizar estas actividades de manera permanente, en la salud socioemocional de los alumnos?

-Al tratarse de actividades que son significativas para la propia persona, generan una visión de que la vida no se basa solo en metas y logros, sino que cobran sentido en sí mismas. El estar motivado por la actividad en sí misma, que puede ser un deporte o hobbies como cantar, bailar o dibujar, cobra sentido independiente del resultado. 

-¿Cómo impacta eso en el cuerpo y la mente?

-Para el cuerpo y la mente, es aliviador. Reconforta y sintoniza de mejor manera con lo que somos: personas con potencialidades y también con limitaciones. En general, estas actividades son a la vez vía de expresión emocional y de relación social, tanto si está relacionado con el arte, como modo de expresión y comunicación, o con un deporte realizado en equipo o de movimiento del cuerpo. En cualquier caso, es comunicación e interacción con el entorno, lo que estará vinculado siempre a salud socioemocional.

-¿Podría explicar qué pasa a nivel químico en el cerebro, al realizar este tipo actividades?

-El nivel químico en el cerebro es complejo de explicar y no se sabe en detalle. Sí es posible decir que las actividades placenteras, en la relación con otros, estimula diversas hormonas con acción a nivel cerebral como la oxitocina (que está relacionada con el amor y la empatía) y actividades de neurotransmisores diversos como la dopamina y serotonina (relacionadas con la regulación del placer y del estado de ánimo y control de impulsos). 

Es decir, la modulación en el cerebro, que es tan compleja, se armoniza mejor en la medida en que existen estas actividades diversas, especialmente si son placenteras, pausadas, que estimulen la relación con otros y que no están vinculadas a una meta determinada.

El silencio, la pausa, el aburrimiento. ¿Cuál es su rol?

El psiquiatra Alfonso Correa asegura que son elementos esenciales para el aprendizaje, ya que nos dan el espacio para recibir lo que está en nuestro entorno. Estas son sus palabras:

1. El silencio

“Es indispensable en toda comunicación, porque da la posibilidad de receptividad. Es imposible recibir lo que el entorno me dice o expresa, si no estoy en actitud de silencio. Solo educándonos en este, tiene sentido la palabra”. 

2. El aburrimiento

“El aburrimiento es también fundamental. Aprender a tolerarlo y entender que no todo tiene que estar constantemente lleno de algo. Si siempre estamos haciendo cosas o entretenidos, no hay tiempo para el ‘intratenimiento’, es decir, tenerse a sí mismo. La razón del aburrimiento no es que se me ocurran más cosas que hacer y así seguir entretenidos”.

3. La pausa

“La pausa apunta a lo mismo y es esencial en toda enseñanza. Son las que permiten que se interiorice el mensaje. Es indispensable para la salud mental, para la valoración del camino y del momento presente y no solo del logro. Una manera de introducirla es dejar de hacer lo que se está haciendo y darse tiempos de ocio, que no va enfocado a una determinada meta”.

José Ignacio Silva

El valor de ejercitarse, con lupa

La actividad física hace bien para el cuerpo, eso lo sabemos. Pero, ¿qué significa esto? El kinesiólogo José Ignacio Silva explica en detalle qué pasa con nuestros huesos, músculos, metabolismo y físico cuando hacemos deporte. 

“Hacer deporte regularmente es clave para los adolescentes. No solo para su salud actual, sino para su calidad de vida futura”, asegura el kinesiólogo de la Universidad Finis Terrae, José Ignacio Silva. En esta línea, menciona que, además de fortalecer músculos, impacta en otras áreas de nuestro cuerpo:

• Salud cardiovascular: esto se refiere a la reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares.
• Huesos más sanos: la actividad física que implica la carga de peso, como correr o saltar, aumenta la densidad mineral ósea en los adolescentes. Estudios relacionan la actividad física regular en la adolescencia con una mayor densidad ósea en la edad adulta. Además, este mismo hecho se traduce en la prevención de la osteoporosis en la edad adulta. 
• Mejor metabolismo: el metabolismo son todos los procesos físicos y químicos del cuerpo que convierten o usan energía. El aumento de masa muscular puede tener un impacto positivo, al mejorar la sensibilidad a la insulina y la composición corporal.
• Movilidad del cuerpo: un cuerpo que se ejercita constantemente se hace más flexible y ágil. 
• Prevención de lesiones: el entrenamiento de equilibrio y fuerza puede reducir el riesgo de lesiones articulares en adolescentes. Esto debido a que, al fortalecer los músculos alrededor de las articulaciones, brinda mayor estabilidad.
• Control del peso: reduce el riesgo de obesidad.