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Regístrate y accede a la revistaQue los padres puedan matricular a sus hijos en el colegio que ellos escojan para la educación de sus hijos, es el propósito de la no selección escolar. La idea principal es evitar la discriminación socioeconómica, religiosa o de cualquier otro tipo. Lo beneficioso de este sistema, aún no se puede evaluar en plenitud, por lo que tampoco sus desventajas.
El nuevo ministro de educación de la administración Piñera, Gerardo Varela, hizo un anuncio en su primer día de trabajo: dijo que pedirá la revisión del mecanismo de postulación a los colegios que reciben subvención estatal.
En junio de 2015 se publicó la ley de Inclusión Escolar, que entre otras cosas, pone fin a la selección arbitraria de los estudiantes en establecimientos que reciben subvención del Estado. En 2016 inició a aplicarse en la región de Magallanes y en 2017 en las regiones de Tarapacá, Coquimbo, O’Higgins y Los Lagos y este 2018, será en el resto del país.
Esta no selección se aplica en los niveles de pre-kínder, kínder, 1º y 7º básico, más el primer año de enseñanza media. Y consiste en que los establecimientos deben aceptar a todos los postulantes, si disponen de vacantes. Sólo de no haber cupos suficientes, deberán usar un sistema aleatorio que asegure que no habrá selección arbitraria (socioeconómica o de otra índole), debiendo dar preferencia en este proceso a los postulantes que tengan hermanos ya matriculados en el establecimiento y a los hijos de los trabajadores del colegio al que se postula.
La posibilidad de introducir cambios, es considerada por expertos como prematura, ya que es un sistema que aún no se aplica a nivel nacional, y tampoco se puede evaluar los resultados que se obtienen en los colegios que no seleccionan.
Juan Pablo Valenzuela, investigador del Centro de Investigación Avanzada en Educación de la Universidad de Chile, señala que “… para revisar el sistema, es indispensable que haya un diagnóstico de cómo se ha ido instalando y se pueda discutir cuáles son los principales desafíos, de tal forma de hacerlo mejor. Sin embargo, esos antecedentes hoy no son públicos”.
A juicio del experto, la no selección “…permite fortalecer el que los colegios enfaticen sus esfuerzos pedagógicos, didácticos y de gestión para agregar valor en el proceso educacional, pues ahora no será una ventaja relativa el que un determinado colegio escoja entre los estudiantes interesados en su proyecto educativo”.
Actualmente los colegios no pueden seleccionar para cursos hasta 6º básico. El profesor Iván Quiñones, director del Colegio San Rafael, de la comuna de Lo Barnechea, señala que el colegio no seleccionaba basándose únicamente en lo académico, sino que lo más importante para ellos, se seleccionaba la familia, que estuvieran en la línea del proyecto educativo del colegio. Con esta medida, han evidenciado que después de 4 años sin poder seleccionar, en las familias de los niños, el proyecto educativo del colegio se desvanece.
Próximamente, el colegio entrará en el sistema de selección aleatoria, que administra el Mineduc, donde los padres deberán postular en una plataforma digital y el colegio solo recibirá a los alumnos que fueron “sorteados”. El profesor Quiñones explica que “…los colegios tienen cierta capacidad de recibir a niños con necesidades educativas especiales, si con el sorteo aumenta la cantidad de niños con algún tipo de trastorno, eso nos conlleva a tener que contar con profesionales especializados, y la subvención no es suficiente”. Además agrega que de esa manera es más difícil de llevar a cabo el proyecto educativo del colegio.
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