Suscríbete a nuestra revista y podrás leer el contenido exclusivo online
Regístrate y accede a la revista0
Los malos resultados arrojados por el SIMCE dejaron en claro las falencias deportivas que existen en la mayoría los colegios del país. Generaron conciencia de que debe haber un esfuerzo conjunto para incentivar a niños y jóvenes, quienes necesitan aprender desde pequeños hábitos en cuanto a alimentación saludable y ejercicios.
Hace algunas semanas se dieron a conocer los resultados de la prueba Simce de Educación Física 2010, medición que estaba considerada en la Ley del Deporte promulgada el 2001 y que se aplicó a una muestra de 13.585 estudiantes de 8vo básico, distribuidos en 335 establecimientos a nivel nacional. Sus resultados produjeron alarma en algunos sectores, asombro de los padres y porque no decirlo, perplejidad a nivel nacional, ya que lo que los expertos venían advirtiendo hace algunos años era una realidad. Solo uno de cada diez niños chilenos presenta una condición física adecuada y los niveles de obesidad y sobrepeso alcanza al 40%.
En el Simce se aplicaron 5 pruebas que tenían como objetivo medir la condición física de los niños. Estas consistieron en la medición del IMC (Indice de Masa Corporal), que mide peso y estatura; Test de Navette, que mide capacidad aeróbica; prueba de abdominales cortos, que mide resistencia muscular; flexión de tronco adelante, que mide elongación; y salto a pies juntos, que mide fuerza muscular. En ninguna de estas pruebas las niñas alcanzaron los estándares internacionales. En el caso de los niños sí lo consiguieron en los abdominales y las flexiones.
Según el subsecretario de Deportes Gabriel Ruiz-Tagle ‘ya diversas encuestas y sondeos daban cuenta de esta dura realidad, como también de la poca eficacia de las políticas públicas para combatir este flagelo. Tenemos rivales muy fuertes contra quienes debemos luchar para conseguir nuestro propósito de fomentar la Educación Física’.
EL PORQUÉ DEL MAL RENDIMIENTO
Hay muchos y variables factores que influyen a la hora de analizar los malos resultados arrojados por el Simce. Estos van desde la poca y precaria infraestructura de los colegios, pasando por la mala calidad de la Educación Física, hasta la poca importancia que le dan los padres al deporte en general.
Hace ya varios años que los expertos venían hablando de esto, que estábamos alimentando mal a nuestros niños y que si seguíamos por este camino los índices de obesidad aumentarían enormemente. De hecho, según la Revista Chilena de Nutrición de octubre de 2006, de 1987 a 2004 la obesidad juvenil habría aumentado de un 12% a un 32%, esto significaría que desde el 2004 a la fecha habría aumentado un 8%. Pero todo esto no pasa solo por la mala alimentación, sino que también el deporte y la cantidad y calidad de la Educación Física que se está entregando en los establecimientos educacionales tiene mucho que ver. El ex-director del Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos de la Universidad de Chile (INTA), Fernando Vio, explica que la tendencia de los profesores, niños y padres de familia, es no darle importancia a la clase de Educación Física. ‘Se considera que es algo externo, que no sirve para nada y que se puede reemplazar por cualquier otra materia que sí va a ser evaluada en la prueba Simce; entonces este tema queda con una prioridad bajísima. Además, tradicionalmente en las escuelas en Chile entre 1º y 4º básico no hay profesores de Educación Física. Son los profesores generales los que hacen las clases, esto significa que ellos no fueron formados para esto’, comenta el académico.
Según los datos del Consejo Nacional de Educación, esto debería cambiar, ya que entre el 2005 y el 2010 el número de jóvenes estudiando pedagogía en Educación Física creció un 84% y la cantidad de programas formativos ofrecidos en Chile creció de 106 a 194. Sin embargo, el segundo año de la carrera el 33% de los estudiantes deserta y el 29% de sus egresados no encuentra trabajo durante el primer año, según
datos del Ministerio de Educación. Esto significa que aunque las inscripciones en esta carrera van en alza, aún queda mucho trabajo por hacer, como darle la importancia debida a las clases de Educación Física.
Para Jaime Fillol, Director de Educación Física de la Universidad Andrés Bello, la razón de los malos resultados del Simce no está sólo en la falta de infraestructura ni en los profesores. ‘Hoy día leo que vamos a mejorar la calidad de la educación si mejoramos los profesores y nuevamente vuelvo a pensar en lo que ocurre en el deporte, que la culpa la tienen siempre los técnicos. En el fondo dejamos de lado al niño. Nunca este es importante, cuando debiera serlo’. Y continúa, ‘en Chile no se hace deporte. No está bien valorado y la Educación Física en el currículum es el área de aprendizaje de menor valor. Antes era un subsector totalmente perdido’.
Durante muchos años se ha malpensado que la Educación Física es una pérdida de tiempo, que aleja del éxito profesional. El sistema educacional chileno promueve, a través del Simce la PSU, a que los padres consideren que lo más importante para sus hijos está en lo académico para que logren entrar a la universidad y se conviertan en profesionales.
¿CÓMO REVERTIR LOS RESULTADOS?
Pero no todo son malas noticias, lo bueno es que si se toman medidas rápidas la situación puede cambiar en poco tiempo, en unos dos a tres años, ya que al partir de estándares bajos, una vez que se comienza a hacer actividad física, la capacidad mejora inmediatamente. Lo importante de todo esto según el académico Fernando Vio, es la sostenibilidad en el tiempo ‘No basta con implementar una política. Supongamos que este año se haga un esfuerzo, se empiecen a hacer la clases que no se hacen, los niños se mueven más minutos durante estas, se consiguen más profesores de gimnasia, pero en un año más pasa la prioridad y volvemos a lo anterior, se pierdo todo’.
Para Jaime Fillol, los profesores de Educación Física ven como una gran desmotivación que el colegio no le dé la importancia a la clase, ‘si se aumenta la cantidad de horas, el profesor va a decir: están valorando mi asignatura, entonces yo tomo un compromiso también’, explica el docente y continúa diciendo que el deporte no pasa sólo por un tema de salud, sino que éste puede ayudar a desarrollar integralmente al niño. ‘Le hace bien para todo: para comunicarse con otros, para tener hábitos, para la autoestima y también para estar más dispuesto a aprender’.
Para Fernando Vio, para que se produzca un cambio son necesarias tres cosas: ‘primero, que los padres le den importancia al tema. Segundo, que exista una cultura del movimiento especialmente en los colegios, que no sea algo de lo que se pueda escapar fácilmente y que además los niños sean evaluados con una nota que tenga valor. Por último, dar facilidades porque tampoco hay muchas. Por ejemplo, hay que tener duchas, patios techados y ojalá gimnasios bien habilitados’.
EL OTRO GRAN PROBLEMA: LA OBESIDAD
Según estudios de la Junji, la obesidad aparece generalmente en las primeras etapas de desarrollo de un niño. Entre los dos y tres años hay una 6% de obesidad, ya a los 6 existe un 23% de niños obesos. Por esto, es ideal intervenir los hábitos lo antes posible y por esta razón, el INTA desarrolló un plan, que será puesto en marcha por el Gobierno, que pone énfasis en preescolares hasta niños de cuarto básico.
El Programa de Intervención Escolar consiste en la aplicación de unas guías alimentarias que trabajan un mensaje distinto cada mes, por ejemplo que se consuman más frutas y verduras. Estos se tratarán durante las horas de clases. Según Vio, el problema de la obesidad no es que la gente se alimente mal porque no tiene dinero para comprar alimentos sanos. ‘Desde el punto de vista de la alimentación la gente en Chile tiene con qué comprar alimentos. Por un kilo de pan, se pueden llegar a comprar hasta tres kilos de fruta y la gente no lo hace, se gastan la plata en comprar pan y bebidas gaseosas’, explica el doctor.
El segundo paso de este programa son las clases de Educación Física, para las cuales se crearon fichas para que se aproveche mejor el tiempo. Por cada año de primero a cuarto básico se hicieron 35 clases de 45 minutos y 35 clases de 90 minutos, en las que aparece qué hacer cada 10 minutos y donde cada ejercicio está perfectamente detallado.
Otra de las medidas que se pretende implementar para combatir este problema es la introducción de kioscos saludables, donde lo primero que se debe hacer es educar a los niños, enseñándoles que la fruta hace bien y les trae muchos beneficios para su salud. Por su parte, los padres y apoderados deben comprometerse con mandarles colaciones saludables a los estudiantes.
Para que todas estas medidas se mantengan en el tiempo, es necesario generar un cambio cultural. Que exista una planificación a nivel de país, en que se dé un solo mensaje, que provenga no sólo del Gobierno, sino también de los colegios, padres de familia e instituciones relacionadas con nuestros niños y jóvenes. Tiene que haber un esfuerzo conjunto con el que se incentive a toda la población no solo a hacer deporte, sino que a alimentarse bien y cambiar los malos hábitos hasta ahora adquiridos.
Descargar material pdf aquí
Revisa nuestro contenido en todas las plataformas desde un teléfono hasta nuestra revista en papel.
Mantengamos la conversación, búscanos en twitter como @grupoEducar
Tweets by grupoEducarIngresa a nuestra comunidad en Facebook y profundicemos el debate.